La decoración zen proviene de una rama del budismo en el que se persigue la paz y la armonía, desencadenando en un reajuste minimalista y tranquilo del hogar.
Aunque sus grandes obras se ven reflejadas en jardines exteriores, aquí os diremos unos trucos para introducirlo dentro de casa:
-Crear espacios abiertos con iluminación natural y ventanas, además de decorar con plantas artificiales, dándole así vitalidad y conexión con la naturaleza y el exterior
-En cuanto a los colores, siempre usar tonos neutros, tierra, para así transmitir serenidad. Sin embargo, sí sería recomendable usar el verde, ya que representa armonía, descansa la vista y nos recuerda a la naturaleza
-Utilizar materiales naturales, orgánicos y respetuosos con el medio ambiente para estar en paz y armonía
-Crear un rincón de lectura para dar pie a la reflexión e introspección y cuidar así nuestra alma
-Deja que las habitaciones crezcan con las personas, ya que la filosofía Zen se apoya mucho en el crecimiento tanto del cuerpo como del espíritu
-Del anterior punto llegamos a este: undecorate. Esto quiere decir deshacerte de cosas que ya no usas o ya no quieres. Recordemos que uno de los principios de esta decoración es el minimalismo, la simpleza y el orden
-Restaurar un mueble para así crear algo nuevo de algo viejo, reconstruir y crecer
-Usar muebles cómodos que no nos priven de que nuestra casa sea también nuestro hogar
-Objetos que son muy usuales en estas decoraciones son las fuentes interiores, el bambú, velas perfumadas, inciensos y la piedra
Todos estos consejos apuntarán a una tranquilidad al llegar a tu hogar, aunque para ello se deben combinar con prácticas Zen como la meditación, el orden y la limpieza. A esta paz interior tanto del cuerpo como del alma, se nos unirá la paz del interior del monedero, ya que al ser una filosofía sencilla y simple nos lleva a lo barato y fácil.
En este enlace podrás encontrar más información de Soluciones ecológicas para decorar tu casa.